En un mundo donde la conciencia ambiental es esencial, cada elección que hacemos tiene un impacto. Adoptar un estilo de vida más sustentable no solo beneficia al planeta, sino que también contribuye a tu bienestar y al de las generaciones futuras. Aquí te entregamos 15 consejos para que puedas lograr tus objetivos.
El cuidado del medio ambiente no es cuestión de un día ni de una sola acción, y si todos pusiéramos un granito de arena, sumaría mucho. Todas las acciones que hacemos a diario se traducen en un impacto al medio ambiente, teniendo repercusiones directas en los ecosistemas más grandes y vitales del mundo.
Y aunque no lo creas, todos tenemos la capacidad de crear un cambio positivo mediante las decisiones que tomamos en el día a día, para impactar menos en el planeta. En este artículo te compartimos 15 consejos para llevar una vida más sustentable, para ser más conscientes de nuestros hábitos de consumo, de cómo usamos el agua, qué fuentes de alimentación o transporte elegimos, entre otros:
No desperdicies electricidad, preocupándote de apagar las luces cuando no estés en la habitación y dosifica la iluminación de tu casa de acuerdo con tus necesidades y no la estética. Y si puedes, prefiere fuentes de energía renovables como la solar. Además, realiza mantenimiento preventivo a tus electrodomésticos y al momento de comprar, prefiere siempre aquellos con mejor eficiencia eléctrica, identificados con la letra A.
Evita generar residuos innecesarios. Con simples acciones como llevar tu bolsa reutilizable cuando vayas de compras, prefiere los productos a granel para evitar los envases de plástico de un solo uso, etc.
Implementa un sistema de reciclaje en casa, para que no acaben en lugares incorrectos.
Prefiere los objetos reutilizables como, por ejemplo, un mug de café que puedes llevar a las cafeterías para que preparen tu bebida ahí, o una botella reutilizable para rellenar con agua cuando lo necesites. La degradación de los plásticos en el medio ambiente es un proceso muy lento y la mayoría de éstos terminan flotando en los océanos.
En la actualidad estamos acostumbrados a que, si algo ya no funciona, lo botamos y compramos uno nuevo. Te invitamos a utilizar los servicios técnicos electrónicos, zapateros, etc, para que puedas prolongar la vida útil de tus cosas, lo que te permitirá no solo ahorrar dinero, sino que evitar grandes cantidades de residuos.
Cuando utilices la lavadora, además de solo hacerla funcionar cuando esté con la carga completa, elige hacerlo con agua fría, porque ahorrarás hasta un 80% de energía y será más eficiente.
Olvídate de este electrodoméstico y limita su uso lo que más puedas, aprovechando los días soleados o cálidos para secar al aire libre. Además de ahorrar energía y dinero, la ropa mantendrá su color y forma por más tiempo, reduciendo los índices de CO2.
Éstos no tienen componentes tóxicos que contaminen las aguas y océanos.
Una fruta o verdura importada necesita 10 a 20 veces la cantidad de combustible que lo que se necesitaría para transportar la misma, en temporada baja y de fuente local.
Recuerda que no puedes botar ningún tipo de aceite en el lavaplatos o desagüe, porque además de tapar las cañerías y dañar el sistema de tratamiento de aguas servidas, es un residuo altamente dañino que terminará en el mar y un litro, puede contaminar mil litros de agua. ¿La solución? cuélalo y guárdalo en un recipiente con tapa, que posteriormente podrás llevar a un punto limpio para su correcto reciclaje.
Compra un cargador y pilas recargables, porque no tan solo ayudará a tu bolsillo, sino que también a no contaminar con este producto desechable y de un solo uso.
¿Sabías que 1.5 millones de encendedores terminan en vertederos cada año? y éstos están fabricados con plásticos y llenos de butano, derivados del petróleo, combinación fatal para nuestro medio ambiente.
Actualmente todos los comercios ofrecen la opción de cambiar las boletas físicas por electrónicas que llegan a tu mail. Puedes hacer el ejercicio con las cartolas del banco, boletas de supermercado, cuentas de servicios básicos y empresas telefónicas, etc.
Regula la temperatura en 20°C en invierno y a 26°C en el verano. Ambos termostatos serán más que suficientes para esas temporadas.
En la actualidad, producimos y compramos 70 veces más que en la década de los 50’, y el 99% de estas cosas, se convierten en residuos en los primeros 12 meses después de la compra. Pregúntate dos veces si realmente es necesario aquello que vas a comprar y recuerda las tres R: reducir, reutilizar y reciclar.
Cada pequeña acción cuenta. Al adoptar estos hábitos en tu vida diaria, contribuyes a la construcción de un futuro más sostenible. Juntos, podemos hacer una diferencia significativa.
Una vida sustentable se refiere a un estilo de vida que busca equilibrar las necesidades actuales con la capacidad del medio ambiente para mantener y proporcionar recursos para las generaciones futuras.
El desarrollo sostenible es de vital importancia en la vida cotidiana por varias razones que abarcan aspectos ambientales, sociales y económicos. Aquí se destacan algunos puntos clave: